Pascua 2017: La esperanza de la resurrección

LA ESQUINA DE ANNALYN

Por Annalyn

Mi esperanza depende de un hombre muerto que vuelve a la vida. ¿Qué tal la tuya?

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Imagen del cortometraje animado Mi Último Día. Puedes verlo más abajo.

¡Él ha resucitado!

Si vas a la iglesia o estás alrededor de cristianos hoy día, oirás probablemente esta frase repetida mucho, seguida por, «¡Él ha resucitado realmente!». Una y otra vez, nos repetimos la buena nueva: Jesucristo, Dios en Carne, el hombre perfecto, que murió por nosotros, ha resucitado de entre los muertos y está vivo hoy, con el Padre en el Cielo y en el Espíritu con sus siervos. Estos son los hechos que nos dan esperanza, fe y vida. Porque si Jesús no resucitó de entre los muertos, no hay resurrección para ninguno de nosotros, y nuestra fe es inútil y lamentable. Los cristianos en el extranjero están siendo torturados y muertos por nada, y los cristianos en Occidente, en relativa seguridad, están abandonando las actividades pecaminosas por nada.

Pero si Jesús resucitó, entonces Él ha conquistado la muerte y el pecado. Hay más en la vida que todos los años en esta Tierra, y eso cambia cómo vivimos aquí y ahora. Él está cumpliendo Su promesa de darnos una vida nueva y plena, en parte dada ahora, y parcialmente dada en nuestros cuerpos celestiales nuevos (Ver 1 Corintios 15, del cual extraigo gran parte de este post).

Así que hoy, en Semana Santa, celebramos a Jesús y la esperanza que Él nos ha dado. Celebramos Su victoria.

Hace unos años, antes de tomar un descanso de Naruto Shippuden, empecé a reflexionar sobre cómo los personajes veían como un héroe a Naruto: cómo los personajes de muchos animes, al igual que los de la vida real, buscan un héroe, alguien o algo que nos salve de lo que nos pesa, las tinieblas y el mal del mundo, la pobreza, la enfermedad, la ansiedad, la adicción, las situaciones perjudiciales. Recientemente he retomado Shippuden, y esto trae de vuelta esas mismas reflexiones sobre la humanidad y en quiénes ponemos nuestra esperanza. A veces nos miramos a nosotros mismos para el rescate, pero la mayoría de nosotros sabemos que, en última instancia, no somos suficientes. Y si tratamos de poner nuestra esperanza en los otros «héroes», terminamos fracasando también. Los médicos pueden realizar cirugías que salvan vidas. A veces los soldados o las autoridades pueden ayudar a proteger nuestras vidas y libertades. Pero nadie nos puede ofrecer el tipo de esperanza que Jesús tiene. Incluso si Naruto estuviera aquí en nuestra realidad, enfrentándose a los líderes del mundo retorcidos y desplegándose para ayudar a muchos en necesidad, sólo podría ofrecer una esperanza temporal, la de compañía y lealtad y quizás la seguridad física en esta era.

Todos sentimos la necesidad de algo que cambiar. Cristianos o no, todos sabemos que el mundo está desordenado, y que estamos desordenados en niveles individuales, incluso si no podemos identificar todas las formas en que esto es cierto. Y sentimos que la muerte, tanto física como espiritual, nunca fue creada para ser una parte permanente de los trabajos de esta humanidad. Algo tiene que cambiar. Entonces, ¿a quién le pones tu esperanza para ese cambio? Estoy poniendo toda mi esperanza en Jesucristo. Conquistó la tumba, el pecado y la oscuridad. Volverá para terminar el trabajo, y le dará a los que le pertenecen una vida nueva, como la suya, en cuerpos eternos. Necesito un héroe. Con su historial, Jesús tiene más sentido.

¡Que tengan una feliz Pascua, queridos lectores!

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ANNALYN

Annalyn, conocida como Alexis en el mundo exterior, es una amante de toda la vida de ficción. Al crecer, los libros le mantuvieron atenta, pero el anime se robó el centro del escenario a mitad de la secundaria. Si no está consumiendo, escribiendo, analizando, o pensando en algún tipo de historia… probablemente está distraída. Pero podría estar corriendo, editando, o saliendo con la familia.

Artículo tomado de Beneath the Tangles

Traductor: Alexis «El Broder» Rodríguez

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